Quintana Roo, enero de 2025. Ichkabal, una de las zonas arqueológicas más importantes de la civilización maya, abre al público tras décadas de resguardo en la selva del Caribe Mexicano.
Ubicada a 40 kilómetros de la Laguna de los Siete Colores de Bacalar y a 75 kilómetros de Chetumal, este sitio histórico promete una nueva experiencia para visitantes nacionales e internacionales.
Ichkabal y su relevancia histórica en la cultura maya
Ichkabal, registrado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en 1996, desempeñó un papel clave en el desarrollo del estilo arquitectónico Petén. Su auge ocurrió entre los años 200 a.C. y 200 d.C., cuando se construyeron estructuras monumentales que superan los 40 metros de altura.
Muchas de ellas presentan conjuntos triádicos, característicos de la arquitectura maya, lo que refuerza su importancia histórica.
La apertura de Ichkabal surge del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza) y un convenio firmado el 10 de enero de 2025 entre el INAH y autoridades ejidales.
Este acuerdo cubre 113 hectáreas, incluyendo el área nuclear del sitio, y otorga certeza jurídica al proyecto de investigación, conservación y difusión del patrimonio cultural. Además, beneficia a 165 ejidatarios y sus familias, asegurando su participación en la gestión del sitio.
Infraestructura y acceso a Ichkabal
Ichkabal ha sido acondicionado para recibir visitantes con infraestructura que incluye una unidad de servicios, estacionamiento, taquilla, áreas de descanso y señalización adecuada.
Para facilitar su acceso, se construyó un camino de 23 kilómetros que conecta con las estaciones del Tren Maya en Bacalar y Chetumal, integrando este sitio en una ruta turística estratégica.
La apertura de Ichkabal complementa un circuito arqueológico junto a Dzibanché, Kinichná y Kohunlich, fortaleciendo el atractivo turístico del sur de Quintana Roo. Esta región, rica en historia y vestigios, se consolida como un destino de interés para quienes buscan conocer más sobre la civilización maya.
Ichkabal recibe visitantes todos los días de la semana, de 8:00 a 17:00 horas, con último acceso a las 16:30 horas. La expectativa sobre su impacto en la economía local y su conservación arqueológica sigue en análisis, mientras se monitorea la gestión y preservación del sitio.
Información de utilidad para profesionales y empresas de Turismo.
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